Tania Humaran
Dado el vínculo cada vez más poderoso entre niños y adolescentes con las TIC, no es de extrañarse que la violencia también encuentre un caldo de cultivo ideal en las redes sociales.
De manera simple, el ciberacoso es una práctica que consiste en “utilizar las tecnologías digitales con la intención de ofender, humillar, amenazar, acosar o abusar de alguien”. Cuando un niño o adolescente es molestado por otro menor a través de internet, teléfono celular o cualquier tecnología, hablamos de bullying cibernético. Pero cuando un adulto se involucra en este tipo de incidentes, el fenómeno es ciberacoso.
De acuerdo con el Módulo sobre Ciberacoso (MOCIBA) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), las víctimas del acoso por la vía digital podrían experimentar las siguientes prácticas:
Ser registradas en un sitio web sin previo consentimiento
Recibir spam o virus para causar daño
Recibir mensajes o llamadas con insultos o amenazas (intimidantes o incómodos)
Ser contactado a través de identidades falsas
Ser dañado al publicar información vergonzosa, falsa o íntima
Ser víctima de robo de identidad
Recibir videos o imágenes de contenido sexual o agresivo
Ser obligado a dar una contraseña para ser vigilado, así como que las cuentas personales sean rastreadas
En 2015 el MOCIBA reveló que 24.5% de los usuarios de internet o celular de 12 años o más ha vivido ciberacoso. Entre los grupos de edad considerados por el MOCIBA como los más afectados por el ciberacoso, se encuentran los jóvenes entre los 12 y 19 años, donde 26.7% de este segmento sufre estas prácticas.
En el caso de Tlaxcala, con un 25.9%, se ubicó por encima del promedio nacional. A la par de otros 19 estados.
La situación se agrava debido al aislamiento en el ámbito familiar; estudios revelan que “Dos de cada tres padres de los menores que han recibido mensajes desagradables o hirientes ignoran que sus hijos e hijas sufran o hayan sufrido este problema”, y el problema en muchos de los casos se revela cuando es demasiando tarde.
Actualmente no existe una legislación adecuada que logre mitigar este tipo de agresiones en el corto plazo, y la desinformación sigue siendo otro de los obstáculos para combatir el flagelo. En el futuro inmediato se prevé que el crecimiento de usuarios de internet venga acompañado de un incremento en las prácticas de ciberacoso y ciberbullying.
Por eso es importante prestar atención a la conducta de sus hijos e hijas. Si percibe que puede estar siendo objeto de alguna forma de vejación, burla o amenaza hable con ellos para que puedan contarle cómo vive la situación. Trasmítales su afecto y comprensión y sugiérales que van a trabajar conjuntamente para solucionar el problema (muchos adolescentes temen que la intervención de un adulto pueda agravar su situación, siendo fuente de nuevas burlas o amenazas
Algunas de estas acciones recomendadas por especialistas:
Nunca responder este tipo de mensajes
Tomar fotos o capturas de pantalla para mantener registro de los ataques
Bloquear al agresor
Hablar con alguien sobre el ciberacoso sufrido
Reportarlo a las autoridades
Evaluar la seriedad de la situación
Mantener los ajustes de privacidad en el nivel más elevado posible
Buscar intermediación de alguna autoridad
A pesar de este panorama sociedad e instituciones empiezan a desplegar acciones para que las personas, especialmente los jóvenes, sean capaces de prevenir y reaccionar adecuadamente ante el ciber bullying y el ciberacoso.
El tema ha merecido la atención del Gobierno de la República que ofrece un apartado en el sitio de internet www.gob.mx donde se ofrece información sobre el ciberbullying, algunas acciones preventivas y algunos consejos en caso de padecer este tipo de ataques; se puede teclear el vínculo directo https://www.gob.mx/ciberbullying, para acceder.
Una de las recomendaciones por parte del sitio oficial de gobierno es formular una denuncia ante la Alianza por la Seguridad en Internet (ASI) una organización constituida en 2009 que conjunta a varias organizaciones pro internet seguro, así como empresas de telecomunicación. El sitio oficial cuenta también con una línea de ayuda y esta avalad por Red de organizaciones de Latinoamérica por el derecho de niñas, niños y adolescentes a un uso seguro y responsable de las TIC. (Red NATIC) Puede acceder a través de http://asi-mexico.org.
También puede encontrar un valioso apoyo en la organización http://pantallasamigas.net. Este sitio cuenta con un enfoque más amigable para los niños y adolescentes y es una de las principales organizaciones en la lucha por una red segura.
Se hace evidente otra vez la necesidad de que como adultos nos mantengamos actualizados en torno al desarrollo y uso de las TIC, de modo que podamos brindar orientación y apoyo a los jóvenes evitando más víctimas de violencia a través de las redes.